Actividades en invierno.

¿ Paramos en invierno ?

 

Cuando llega el invierno, mucha gente deja de realizar salidas y actividades en el campo por el frio, porque el día es más corto, pereza, etc. La verdad es que cada estación tiene su encanto y en todas se pueden practicar multitud de actividades y la luminosidad, la temperatura y las precipitaciones no tienen que ser una escusa.

También entre semana cuando habitualmente trabajamos, la noche llega enseguida, pero eso no tiene que ser un limitante para salir, simplemente un condicionante para preparar la salida de otra manera. Adaptarnos a nuestro tiempo libre y equiparnos según las condiciones exteriores.

En invierno se sigue haciendo kayak, ciclismo, el senderismo cobra otra perspectiva por los colores de la naturaleza, la nieve empieza a hacer su aparición y nos trae otras posibilidades deportivas y de ocio, la tecnología nos ofrece soluciones para continuar de noche o con frio, ropas técnicas, iluminación, gps, deportes de interior, rocódromos y gimnasios, clases de zumba y muchas otras alternativas que se nos ofrecen.

 

Ejemplo de salida nocturna realizada entre semana después de trabajar.

Normalmente tenemos la suerte de contar cerca con naturaleza, montañas, campos, ríos y en esta época nos encontramos con la ventaja de estar menos masificado y poder hallar calma y tranquilidad en nuestros paseos, ya sea en solitario, en familia, con amigos o con el club de montaña de tu zona, y podemos recrearnos y rodearnos de naturaleza casi salvaje con estampas bucólicas de esta época del año, pero SI hay un gran peligro que nos acecha y debemos estar alerta para detectarlo.

El "PELIGRO" de salir en invierno.

 

Si bien es cierto que cada estación tiene sus peligros, también es cierto que nos debemos adaptar a ellos. En verano nos cuidamos del calor, del sol de la deshidratación, en otoño podemos ser prudentes con la caída de ramas o resbalones con las hojas de los árboles, caídas y humedecidas, en primavera nos protegemos de las lluvias y podemos evitar los cauces y las riadas, en invierno nos cuidamos de los resbalones, el frio, la hipotermia, pero sobre todo, el mayor peligro que existe a la hora de planificar nuestro tiempo libre en invierno o en condiciones más extremas de lo habitual, somos nosotros mismos, nuestras escusas, nuestra pereza, nuestros miedos, que si hace frio, que si a las seis ya es de noche y cómo voy a salir a oscuras al campo, que si llueve, o cualquier otra razón que tu cabeza quiera imponerte para quedarte en casa y no disfrutar de la suerte que tenemos a nuestro alrededor.

Combatir nuestro enemigo interior.

 

Normalmente nuestro enemigo interior se ha criado con nosotros desde tiempos inmemoriales y su mayor habilidad es el camuflaje, muchas personas ignoran si quiera que existe, por eso el primer paso para combatir a ese ser que nos impide disfrutar de la vida, es el reconocer su existencia ya que con eso tendremos un porcentaje muy alto de batalla ganada.

Una vez detectado el siguiente paso es estar muy atentos, pues en cada decisión que tomamos, el enemigo está presente, ya sea en forma de miedos, expectativas,  experiencias pasadas, etc, por lo que debemos estar muy atentos y saber discernir en nuestro interior, el porqué de nuestra decisión. Decido quedarme en casa porque estoy cansado y fuera hace frio o hay algo en mi interior que quisiera salir a la aventura de la vida y no le dejo.

Si eres consciente de que existe en tu interior ese enemigo, ya tienes la llave para vencerlo, tienes que plantearte si realmente te apetece hacer algo que te haga acostarte esa noche con la satisfacción de haber hecho algo diferente que te ha llenado o acostarte siendo un día gris más. 

Vive la vida porque día que pasa día que no vuelve, y al acabar el día piensa qué hiciste con tu tiempo libre y si es lo que te llena realmente o hubieses hecho otra cosa y porqué no la hiciste.